



1Téléphérique du Salève - Teleférico del Salève
Súbase al teleférico de la Salève y ascienda en pocos minutos a 1.100 m de altitud. Desde allí arriba, podrá disfrutar de unas vistas panorámicas impresionantes, así como de un sinfín de actividades de naturaleza, deportivas, culturales y gastronómicas.<br/>El teleférico de Salève, joya de la corona de la región y con casi cien años de antigüedad, le lleva a 1.100 m de altitud y le invita a descubrir la riqueza de este paraje de montaña catalogado Natura 2000. ¡Y la subida es sólo el principio!
Desde la terraza del Rebuffel o la azotea, disfrute del extraordinario panorama de la campiña ginebrina, la ciudad de Ginebra y el lago Lemán, durante el día o al atardecer en una noche de verano, mientras saborea un cóctel.
Durante su visita, aproveche el espacio museístico de 150 m² para descubrir todo sobre la Salève y el teleférico, participe en las visitas "La Salève desvelada" y "La fabulosa historia del teleférico de la Salève" y descubra la naturaleza a través de actividades para niños y familias.
Los más deportistas pueden probar la escalada en nuestro muro de 20 m de altura con nuestro monitor (de pago, previa reserva, días y horarios en nuestra página web), pasear por el sendero que lleva al restaurante Observatoire o reservar un vuelo en parapente.
Para comer, el Café 1100 es el lugar ideal para una pausa gastronómica.
Y para una comida o cena gourmet, opte por el restaurante Vertiges (imprescindible reservar).